Los pavimentos industriales son aquellos suelos especialmente diseñados y fabricados para ser instalados en entornos industriales. Estos deben estar compuestos de materiales resistentes para el tipo de actividad concreta que se vaya a desarrollar. Además, deben garantizar la seguridad de aquellas personas y vehículos que lo utilicen. También deben ser resistentes, funcionales, etc.
A continuación, te contamos más sobre algunas de las principales características que deben tener los pavimentos industriales. ¡Toma nota!
Resistencia Mecánica.
Los pavimentos que se instalan en el sector industrial deben ser capaces de soportar cargas pesadas. En este sector es frecuente que se utilicen vehículos muy pesados, como camiones.
Además, también deben ser capaces de soportar un tráfico intenso de vehículos, maquinaria, y personas sin que este se deteriore.
En este sector, también puede ser frecuente que se puedan producir impactos durante determinados procesos. Por tanto, es muy importante que el pavimento sea capaz de soportar todos estos factores que te hemos comentado para evitar que se dañe.
Resistencia Química.
Los pavimentos industriales también deben ser resistentes a productos químicos. En este sector es frecuente que se trabaje con productos que puedan ser corrosivos. Por ejemplo, aceites, grasas y disolventes, etc. Que sea resistente a todo este tipo de productos es fundamental para evitar daños.
Antideslizante.
Otro de los factores más importantes que debe tener un pavimento industrial es que sea antideslizante. Esto tiene como objetivo garantizar la seguridad de los trabajadores. En caso contrario, se pueden producir accidentes, como resbalones o caídas, en aquellos lugares donde haya derrame de líquidos.
Fácil de limpiar y mantener.
Otro de los requisitos que debe tener un pavimento industrial es que sea fácil de limpiar y mantener. En este tipo de espacios es frecuente que pueda producirse polvo, grasa o líquidos durante el desarrollo del trabajo. Por eso, es fundamental que el suelo sea uniforme y sin grietas para evitar la acumulación de suciedad y bacterias. Debe ser fácil de limpiar y cuidar.
Resistente y duradero.
Los pavimentos industriales deben ser especialmente resistentes para evitar que tengan que ser reemplazados por su deterioro.
Conductividad eléctrica.
En determinadas industrias, también puede ser especialmente importante que el pavimento tenga propiedades conductoras o aislantes con el objetivo de garantizar la seguridad de los trabadores, así como de la maquinaria y equipos que se utilicen.
Resistente a los cambios de temperatura.
En algunos tipos de industria pueden llegar a alcanzarse temperaturas muy altas o bajas, dependiendo de la actividad concreta que se desarrolle. Por eso, en estos casos, puede ser de vital importancia que el pavimento sea resistente a los cambios de temperatura sin que se deteriore.
Fácil y rápida instalación.
Por último, también es importante que el pavimento sea fácil y rápido de instalar. Aunque, está claro, en Niberma siempre recomendamos acudir a una empresa especializada en pavimentos como la nuestra. Esto te permitirá conseguir un acabado perfecto y duradero capaz de soportar todo tipo de elementos.
El hecho de que el pavimento sea fácil y rápido de instalar permite que la industria no tenga que parar su actividad durante un largo periodo de tiempo. Lo que se puede traducir en grandes costes.
En definitiva, es fundamental contar con el asesoramiento de una empresa especializada en la materia para elegir el pavimento más adecuado en cada caso. Y es que todos los sectores no tienen las mismas necesidades dentro del sector industrial.
Elegir el pavimento más adecuado es fundamental para garantizar la seguridad de los trabajadores, proteger los equipos, etc. Todo esto se traduce en una reducción de costes de mantenimiento y una mejor funcionalidad.
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